A vivir pero viviendo.
No es un mes más, ni una semana más. Me digo. No dejan de llegarme noticias tristes de personas que se marchan de esta vida irónica e injusta. Hemos empezado a restar, Alicia. A restarle momentos a la vida. A los días, a sentir lo bien que sabe esa felicidad compartida, esos momentos que ahora le robamos a la vida, viviéndolos eternos. Guardándolos (para el invierno) y volviendo a ellos cada vez que nos falta la vida. Que se nos agota el aliento, y no recordamos nuestro porqué. Porque dudas, porque fallas y porque te...