Mucho se habla de AMOR PROPIO pero siempre nos perdemos a la hora de encontrarlo.
Una empieza a mimar su amor propio dedicándose tiempo. Tiempo para escucharte, para ver como te cuidas, te hablas, te miras. Tiempo para sentir lo que duele, en el corazón y en nuestra mente.
Cuando empezamos a dedicarnos tiempo y empezamos a cuidar cada parte que lo necesita, todo empieza a cambiar.